Conocida con los nombres de vaqueta o vaquetilla, este tipo de piel procede de los bovinos, normalmente ternera o becerro y a menuda curtida al vegetal.
Destaca por su flexibilidad (no siempre), grano apretado y una flor muy fina, aunque con una superficie y acabado lisos.
Muy apropiada para la confección de marroquinerías o artículos de lujo.
Este tipo de piel suele ser ideal para artesanos, puesto que con las diferentes curticiones, aumenta el número de decoraciones y acabados posibles.
Los tonos de las fotografías están ajustados al máximo, aún así podrían variar un poco con la realidad.