Las pieles de cabra o cordero son una muy buena opción a la hora de elaborar nuestros textiles.
Nos permiten elaborar piezas bastante resistentes.Posee una gran suavidad, delgadez y ductilidad y esto lo hace adecuado para prendas y usos delicados del mismo, como por ejemplo guantes de mujer.
Las pieles de ante, resultan perfectas para calzados y marroquinería pequeña.
Este piel se obtiene de las ovejas. Si lo comparamos con el vacuno resulta un tipo de piel mucho más suave y sutil.
Proporciona la mejor relación grosor-destreza. Gracias a su elasticidad es una muy buena opción para la elaboración de chaquetas
Es un cuero cómodo que mantiene el calor y es un gran aislante. Lo que la convierte en una piel ideal para el invierno.
Se utiliza principalmente para la confección de: guantes, zapatillas, ropa fundas, asientos automóviles. etc.